La roña emocional nunca es más evidente cuando te
encontrás frente a una persona que nunca pensaste que podría tener novio/a y sin embargo consigue uno/a. La roña emocional nunca es todavía más
aturdente cuando esa misma persona se pelea y al poco tiempo... está saliendo con alguien más. Te
preguntás qué estás haciendo mal o no haciendo, qué tan desastrosa o perturbada sos, en fin, te
preguntás finalmente
por qué ella/él y yo noAceptémoslo, nadie es tan buena persona que nunca en su vida lo haya pensado nunca.
Lejos de que estas peripecias de la vida mellen en mi ánimo ya, debidamente apaleado por las circunstancias,
prácticamente he decidido reírme de mi propio patetismo, ya que puede resultar muy gracioso, y también, tomar medidas al respecto. Por lo que si el amable lector está atravesando un momento similar, tenga a bien tomar estas
observaciones poco menos que como consejos, sino más bien puntos objetivos de vista para vivir solo y soltero sin que la abstinencia a uno le pese.
1. ¿Qué se hace en época de sequía? M'
hijita, a cerrar las persianas y esperar a mejores tiempos. Junto con el invierno y el frío he decidido no salir. Ahorro plata, cuido mi hígado y evito enfermedades por la salida destemplada del boliche (digamos que la nueva ley tampoco ayuda demasiado). Arreglarse sólo lo justo y necesario, no intentar provocar miradas ajenas. Ante tan poco interés del sexo opuesto, un esfuerzo excesivo por llamar la atención sería considerado como
desesperación (que, a estas alturas ya se trasluce hasta en las situaciones más cotidianas, por lo que hay que intentar disimular). Volver a la naturalidad y a la
hosquedad si es necesario; los hombres y mujeres tienden a confundir la mala educación con el misterio. Desaparecer por un tiempo del mapa tampoco está mal... eso hace que a uno lo extrañen o al menos se pregunten de por qué uno no está molestando tanto como usualmente lo hacía.
2. No hacerse amigos de la esperanza y, mucho menos, aceptar sus consejos. Ésto siempre acarrea que nosotros nos formemos una imagen mejor -y, por lo tanto falsa- de como creemos que nos va a ir en algún evento, fiesta, casamiento, cumpleaños, etc. Siempre intentar ver el lado pesimista de las cosas ayuda a que si pasan cosas buenas, nos sorprendamos y, si no pasa nada, al menos no nos hagamos ilusiones.
3. ¿Qué hacer con todo el tiempo que antes gastábamos en agradar al sexo opuesto? Ocuparlo. Lo mejor es empezar actividades que nos mantengan lo más alejados de cualquier deseo o sentimiento sexual como el leer filosofía, hacer
macramé o empezar un curso de jardinería.
Personalmente, estoy tan contenta leyendo a
Nietzche,
Freud y
Lacan todo el tiempo, que la mayor parte del día me entretengo sin pensar en cómo puedo hacer para tener sexo.
4.No dejar de ser selectivos. De ninguna forma y bajo ningún punto de vista uno tiene que agarrar lo primero que se le cruce. Ya me pasó y me fue muy mal. Sé que es duro, sé que a lo último uno termina viendo atractivos hasta a los pajaritos del árbol del vecino pero hay que
sobreponerse. NO miremos con otros ojos a los que antes nos parecían horribles, NO miremos con ternura a nuestros amigos del sexo opuesto y, sobre todo, NO optemos por la zoofilia que tampoco será
gratificante. Puede parecer difícil ahora, pero nos ahorrará muchísimos dolores de cabeza mañana.
5. Si todo lo anterior falla -y puede fallar- lo mejor que se puede hacer es comprarse una buena barra de chocolate, mirarse un animé de principio a fin y hacerse un baño de crema. Tampoco descarto el salir a comprarse ropa o ir al cine.
Mientras la roña siga, va a haber que lidiar con ella. Este es mi plan de momento, por suerte no me va tan mal y, de paso estoy consiguiendo ahorrar algo de la plata que antes me gastaba en salir y en alcohol. Cuando ya es una cuestión de VARIOS meses la resignación puede ser una gran aliada y muy efectiva contra las ganas de darnos la cabeza contra la pared y volvernos a preguntar
POR QUÉ ELLA Y YO NO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!